corto circuito

hay que puro desenfocarse, es la opción... vivan las drogas, viva el sexo, viva la música electrónica !!... ¿o no?... ya no se que escribir... perdí la inspiración... o más bien, la inspiración esta muy lejos... y no volverá pronto... la única posibilidad es que aparezca una nueva fuente inspiradora... y en tal caso, no sabría que hacer...

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¿que hiciste ayer?... esa fue la pregunta más recurrente el fin de semana... mmm, salí por ahí, tenía que hacer unos "trámites"... ya, si claro, si te desapareciste todo el día y volviste el domingo, cuenta po, ¿pa donde fuiste?, ¿valió la pena?... jajaja...
¿por qué la gente piensa que si uno no quiere decir a donde fue estuvo haciendo cochinaditas?... bueno, y si estuve portandome mal, ¡¡que tanto!!... problema mio... en todo caso... desde que volví a la gracia me he portado casi bien... lo que es un gran paso y me ha requerido un gran esfuerzo... y lo que pasa es que es muy fácil desenfocarse, es muy fácil porque las ofertas están ahí... a la vuelta de la esquina, a un solo llamado, a una insinuación por un chat... las oportunidades son una plaga... y bueno, la carne es débil y mi espíritu también...

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"...¿y que es amor?... ¿que crees tu que significa amor?..." así dice la canción de alberto plaza... super chanta inspirarse en esas canciones cebolleras... pero al parecer, hay otros que pasaron por lo mismo en algún minuto y plasmaron su sentir en esas canciones... esta canción de plaza se llama "pudo ser"..."pudo ser...un amor de los grandes... pudo ser...", pero ni de consuelo sirve... para llorar un rato podría ser...
estoy conversando con un amigo... hablamos de mujeres... de 2 precisamente... y me mandó un texto...
"Me callo porque ha ganado la razón al corazón,
pero pase lo que pase,y aunque otro me acompañe,
en silencio te querré tan sólo a ti,
me callo porque es más cómodo engañarse."
que fuerte... lo que es yo... no pienso en callarme... no me voy a engañar, pero tampoco me voy a ilusionar... si ni siquiera hay una señal... una señal es todo lo que pido... es todo lo que necesito para seguir adelante... y es que si me dejas solo la cuesta se hace más difícil... háblame, escríbeme, llámame... nose, ¡has algo!... no te quedes así, conteniéndote, que si no me das alguna señal, voy a pensar que no te nace... y eso significa que solo me queda una cosa por hacer...
olvidarte...

inconsecuente noguera.

atragantado

¿Porque es tan difícil desilusionarse de las personas?, ¿Acaso espero demasiado?, ¿Acaso espero lo mismo que doy?, ¿Donde quedo eso de dar y recibir?, ¿Donde quedo esa amistad incondicional?, ¿Incondicional?... si, incondicional.
Sino te llamo no importa, ¿que te preocupa?, ¿Que te olvide?... ¿y por qué no me has llamado tu? ¿Acaso yo no debería esperar lo mismo?... aunque no creo que me hayas olvidado, no después de lo que vivimos, no después de lo que nos conocemos.
Pero que más da, la amistad es así... las personas van eligiendo sus propios caminos y la vida nos une y nos separa, pero la amistad no necesariamente muere, sino que cambia. Cambia a un estado superior, más avanzado, en el cual ya no se pide nada a cambio, en el cual se siente afecto y no interesan los rencores, ya no importa que tan seguido nos vemos o hablamos, sino que como nos sentimos cuando eso sucede.
Pero casual o causalmente, cuando las vidas ya se han distanciado, los encuentros son productos de la necesidad imperiosa de ayuda más que de ganas de compartir o saber del otro. Y cuando me llama algún amigo de esos no me molesta, conversamos de nuestras vidas en 5 minutos y después es algo como; “oye, te llamaba porque resulta que…”. Yo también hago lo mismo, y lo encuentro increíble. Si para eso son los amigos, no para cobrar sentimientos cochinos. Los amigos están para los cachos, pero en el largo plazo.
Al principio todo parte bien, por lo general, amigos de carrete. Que la fiesta, que el asado, que fulanita, que anda a bailar con la amiga para que yo pueda desarrollar mi estrategia de seductor. “Oye, juntémonos a piscolear y nos fumamos un pitito po, pero hasta temprano que tengo prueba mañana...”. Esta es la etapa en que los amigos no sirven para los cachos importantes, si uno pone muchos problemas, se empieza a apartar rápidamente del grupo “cero rollo”. Me carga cuando aparece un gallo "X" y empieza con sus rollos y sus cachitos, ¿Cómo será este gallo que tiene que recurrir a mi que me viene conociendo y no va con sus amigos?... ¡Abort Mision!...”oye, se suspendió el asado porque nadie podía poner la casa ah... te mando un mail para que nos pongamos de acuerdo para la otra ah...adios ah...”. Es que nadie puede.
El momento de distanciarse llega tarde o temprano, y es ahí cuando las cosas se ponen en la balanza, sin embargo, no sabremos hacia que lado se inclina hasta que uno de los dos necesite algo del otro. Pero que nos llevo al distanciamiento es un factor influyente, ¿fue una mujer?, ¿fueron las drogas?, ¿o el trabajo?... Cuando uno sale del colegio o de la universidad se produce un cambio importante, sobre todo porque uno conoce gente nueva, diferente, y llama la atención. Es normal, es común. Sería raro si no sucediera así. Con el tiempo me he dado cuenta que voy dejando grupos de amigos en el camino, pero no los he dejado olvidados, sino que están ahí, para cuando los necesite. Y disfruto compartiendo unas veces con unos y otras con otros. Y si tuviera que decidirme por uno, decido por ninguno. Si al final estamos solos. Y no hay vuelta que darle.
Y para la soledad la única solución es tener ese flechazo, ese flechazo que cega e idiotiza. Ese flechazo por el cual uno esta dispuesto a dejarlo todo, y cuando digo todo me refiero a todo. Hogar, familia, bienes, amigos... por supuesto... amigos. ¿No estarán pensando que me debo a ellos?, ¿O realmente piensas que tienes derecho a meterte en mi vida?, ¿en que momento sentiste la autoridad para pensar así?, ¿me estás juzgando?, si crees que estoy equivocado ¿por qué no me lo dices a mi en vez de comentarlo con el resto?, ¿no te parece lo que hago con mi vida y me castigas sin tu amistad?, ¿de eso se trata?. Me desilusionas. Me duele. Me haces sufrir. No esperaba esto de ti. Te voy a decir algo, no es la primera vez que me pasa y tampoco creo que sea la última, pero no te imaginas como siento que haya sido contigo.
inconsecuente noguera.

Neruda

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: "La noche esta estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

pablo neruda

ejectado

voy caminando para tomar la micro a mi casa... son las 7 de la tarde, me quedé media hora extra, no remunerada, apagando unos incendios... mi ánimo no es bueno, me duele un poco la cabeza y sol sigue pegando fuerte... camino a la esquina donde siempre me subo a la micro en la luz roja, porque nunca pude pararla en el paradero... mirando la calle, y la gente que camina por la vereda, veo a una mujer, guapa, va vestida con una pollera media hipie y una polera sin mangas... pasa muy cerca mio y se sube a una micro... lo dudo una y otra vez, nunca seguí a nadie, pero me decido y subo a la micro... subo por la puerta de atrás porque justo la micro parte... va llena de gente, a si que mando a pagar el pasaje..."se paga, se paga, se paga, se paga..."... mirando por la ventana me fijo que ella no se baje sin que me de cuenta... de a poco la micro se va vaciando... ya no tengo idea donde estoy, no se a donde va la micro y hemos dado muchas vueltas... la busco entre la gente y la veo, esta parada al principio del pasillo, yo sigo al lado de la puerta trasera... se libera un asiento cerca de ella y se sienta... pasan las cuadras y solo quedo yo de pie en la micro, todos los asientos estan ocupados y nadie se apiada de mi cansancio y de mi dolor de cabeza, que a estas alturas ya han pasado a un segundo plano... para suerte mia, la señora gorda que va sentada al lado de ella se para... ella se queda sentada al lado del pasillo y yo me acerco y le pido permiso... ella mueve los pies y me da la pasada (me molesta la gente que hace eso, yo me paro para que la persona pase)... paso frente a ella y me siento... miro por la ventana y con el reflejo veo que ella me esta mirando, doy vuelta la cabeza rápidamente y ella mira para otro lado, pero sabe que la pillé... ahora la miro yo... ella se da cuenta, pero no me mira... finalmente no aguanta más y me dice... ¿que miras?... me pilló volando bajo, no esperaba esto... piensa, piensa, piensa... a ti, perdona... y miro por la ventana deseando salir ejectado con mi asiento... ella se da cuenta de que fue pesada y me dice, ¿cómo te llamas?... nicolás...nose porque inventé, nunca miento... ¿y tu?... josefina... también me mintió, o al menos esa es la sensación que me da... ella se para y se baja de la micro... yo me quedo mirando desde mi asiento... ¡¡que tonto!!, ¡¡porque no le dije algo más!!... espero que la próxima vez me resulte mejor.
inconsecuente noguera.

Sub Todo... por Julieta Farfala

¿Qué hago sentado aquí de nuevo? Las mismas fotos, los mismos asientos de plástico. Otra vez el resplandor de las luces sobre mi cabeza. El mismo movimiento del vagón, ladeándose de un lado a otro, como una serpiente en medio del desierto. Las mismas paradas, el mismo lugar.
Y nada cambia, sólo la gente que entra y sale y parecen no darse cuenta en lo que se están metiendo. O tal vez sí. Quién sabe. Pero… ¿por qué les es permitido regresar a sus casas, a sus trabajos, a sus vidas? Tal vez allá está su castigo. O sencillamente son más rápidos que yo y al descubrir todo esto pudieron escapar. ¿Pero qué pasa con aquellos que siguen viniendo, día tras día, y hacen de todo esto nada más que otra simple forma de movilización en sus vidas? Puede que su función es ver que todo siga igual, que yo siga aquí, atrapado entre el murmullo de la gente, de los carteles publicitarios y los naranjos asientos de plástico. Pero aun así… ¿qué ganan con todo esto?
Parece que no tengo más alternativa que permanecer aquí. Si al menos pudiera cambiarme de vagón, o tal vez si me permitieran bajar en alguna estación… sólo por un instante, nada más. Y sentir así nuevamente el suelo firme bajo mis pies, mirar hacia arriba y ver el otro techo. No éste que casi toco con la punta de mis dedos, sino ése otro que es mucho más alto y que aun sin sol y sin estrellas se ha convertido en una especie de cielo para mí.
No es que no lo haya intentado. Claro que sí. En un comienzo trataba todos los días, en todas las paradas, pero siempre hay alguien más, que empuja hacia dentro y sin saber me encierra aquí de nuevo.
Hoy saqué dos avisos publicitarios y los cambié de lugar. Aunque lo hice en la mañana, muy temprano, para que nadie me mirara raro. Pero pensándolo bien, nunca nadie se ha fijado en mí. Ahora se ven mucho mejor al otro lado del vagón. Pero ni de eso se dan cuenta los demás. Bueno, los que están aquí por primera vez, claro que no. Pero hay algunos que todos los días se suben aquí y muchos notan que la casualidad los trajo de nuevo a este vagón. Aun así, no son capaces de distinguir el cambio que hice en la “decoración”, como me gusta llamarla.
Me extrañó ver a ese hombre preguntar la hora. ¿Qué es el tiempo? ¿Qué son las horas, los días, cómo eran las noches? Ya no sé que es eso. Tiempo… para mí, sólo estaciones que se repiten cuando hacemos todo el recorrido de nuevo.
¿Qué por qué tengo esta cara? ¿Me lo dice a mí? No, perdón, creí que le hablaba a otro. ¿Dónde me bajo?, no lo sé. Yo no me bajo. ¡Bah!, ¿Y por qué lo encuentra raro? Pero si está clarísimo. ¿No me entiende? No sé… he tratado de bajar, pero no puedo, siempre hay algo que me lo impide. Sí, si he pedido ayuda. Es que nadie me escucha. De hecho, es usted la primera en dirigirme la palabra desde que estoy aquí. Sí… ¿qué raro, no? Ya ve como están las cosas y yo sigo aquí. Le digo que es inútil, no puedo salir, lo he intentado mil veces. Salga usted. Bueno, adiós. Fue muy agradable hablar con alguien.
¿Y por qué no se bajó? ¿No pudo? Bueno, trate en la próxima estación. Ahora sí, adiós. ¡Vamos! ¿Todavía aquí? Parece que usted tampoco va a poder salir; tome asiento.
Bueno, ya era hora de que alguien viniera a hacerme compañía.

Julieta Farfala.

hábitos

¿mis 5 hábitos extraños?... que difícil... la verdad es que puse un seudónimo porque las cosas que escribo no son reales... por supuesto que la gran mayoría tienen mucho de mi, pero no necesariamente me pasaron o reflejan lo que siento... entonces, ¿sobre quién escribo los 5 hábitos?, ¿sobre inconsecuente o sobre el que escribe?... solo escribiré...
1.- como de noche, sí, me levanto a las 4 de la mañana, voy a la cocina y abro el refrigerador. las dos primeras semanas del mes hay cosas; flanes, uno más unos, galletas en la despensa, etc... las últimas 2 semanas no hay nada... pero me levanto igual con la ilusa esperanza de encontrar algo que echar al buche... por lo general termino tomandome un vaso con agua, aunque algunas veces he cocinado hasta pan...
2.- tiendo a no escuchar cuando me hablan, y es que la verdad, soy mono atencional... aunque puedo hacer más de una cosa a la vez, como caminar y comer chicle, solo puedo poner atención a una de ellas... entonces si me ves haciendo algo, no me hables...
3.- a veces, y solo a veces, me enchufo el ipod y canto frente al espejo, es que siempre quise ser cantante... todo partió cuando tenía como 4 años y miguel bose cantaba "voy a ganar"...
4.- me quedo dormido en cualquier parte... cuando tengo sueño, duermo... me da lo mismo si tengo que dormir parado, de lado, de cabeza, colgando, o como se les ocurra... cuando duermo, ¡duermo!... una vez me echaron de un museo en londres, porque me quede dormido en una banca apoyando la cabeza en un cuadro que parece que era caro, a los gringos no les gusto nada...
5.- cuando tengo que ir a un baño que no conozco, levanto la tapa del water con el pie y la mantengo afirmada mientras hago pipí... es que realmente me da asco tocar la tapa y sentir que esta humeda o con porosidades... ¡puaj!
En fin...

la tele

entre esos días estaba viendo televisión en la salita de mi piso compartido, era una televisión como de los años 70, en colores y muuuuuy estilosa. Tenía la gama de colores mala y todo se veía con mucho morado y verde, un tanto sicodélico. entre tantos canales con basura europea, donde se podían encontrar cosas raras como un canal que transmitía las cámaras de seguridad de los cementerios durante las noches (freak), me encontré con un ciclo de cortometraje. justo calzó más o menos con el festival de cortometraje de barcelona, por lo que ya venía en onda cortos. entre los cortos que vi hay uno que me gusto mucho, lo encontre genial, espero poder escribirlo de la misma manera que lo vi. una mujer se encuentra en su casa, parada en la puerta de entrada mientras conversa con su vecino. El vecino le coquetea y ella solo quiere que se vaya para poder cerrar la puerta. Finalmente el vecino se despide y cruza la calle para ir a su casa. La mujer cierra la puerta y va a la cocina. toma una copa y una botella de vino y camina al living. se sienta en el sillon frente a la tele, prende la tele y se sirve vino. toma unos sorbos y deja la copa en la mesita de centro. con el control remoto empieza a cambiar de canal en busca de algún programa entretenido. de repente llega a un canal en el que se ve a ella misma, como si la tele la estuviera mirando. con la impresión y el susto bota la copa. se agacha a recoger la copa mientras la tele esta mostrando en tiempo real lo que ella esta haciendo. la mujer baja un canal y la tele muestra una repetición de cuando ella bota la copa. entonces la mujer sube un canal y la tele la muestra a ella nuevamente en tiempo real. la mujer sube otro canal, y ahora se ve a ella y a su vecino conversando en el sillón donde ella esta sentada. la mujer sigue subiendo de canal y a medida que sube de canal se adentra en el futuro. primero conversaba con su vecino en el sillón, después se besaban, despues estaban en una actitud como de novios viendo una película, luego estaban en una ceremonia de compromiso, un canal más arriba un bautizo, ellos con más niños, los niños crecen, ellos van envejeciendo, los niños ya están grandes y se van de la casa, ellos con los nietos, ellos ya viejitos sentados en el sillón mirando la tele, sube un canal más y solo ve puntitos...baja un canal y vuelve a verse con su vecino ya viejos mirando la tele. la mujer piensa un tanto nerviosa y se da cuenta que su vida no sería tan mala, hasta le gusta la idea. se para y va en busca de su vecino, abre la puerta y corre en dirección a la casa de al frente. cuando esta cruzando la calle, pasa un auto y la atropella.
fin.
inconsecuente noguera